Sé fiel a ti misma: reflexiones sobre autenticidad

Hola, Curly:

Parece sencillo ser fiel a una misma, ¿verdad? Sin embargo, cuando te detienes a pensarlo, te das cuenta de que es mucho más difícil de lo que aparenta. Vivimos en un mundo lleno de presiones sociales: cambia de peinado, de ropa, de perfume, adelgaza, compra el último dispositivo tecnológico… todo para no quedarte fuera de la era digital. En este contexto, mantener tu autenticidad se convierte casi en una misión imposible.

Esa presión casi me vence una vez más. Llevo el pelo corto desde hace seis años y siempre lo he disfrutado, pero, de repente, me encontré buscando una peluquería para hacerme unas trenzas. El resultado no fue nada positivo. Las trenzas, además de estar mal hechas, me provocaron un dolor de cabeza insoportable desde el momento en que la peluquera terminó de hacerlas. Y por la noche, cada vez que apoyaba la cabeza en la almohada, parecía que veía estrellas.

No aguanté ni dos semanas. Me las quité rápidamente, arrojando a la basura los 58 € que me habían costado. Pensé que esa experiencia bastaría para recordarme lo que realmente me hacía feliz, pero no fue así. A pesar de la incomodidad y de renunciar a esa sonrisa amplia que me aparece cada vez que me corto el pelo, seguía obsesionada con la absurda idea de llevar trenzas o extensiones largas, aunque esa decisión me alejara de mi auténtica felicidad.

Esta tarde, sin embargo, algo cambió. Me vi buscando de nuevo una peluquería para hacerme trenzas. Quería un lugar decente, donde los precios estuvieran claros y donde no me sintiera juzgada o cobrada según mi aspecto o nivel de español. Por desgracia, muchas peluquerías afro que conozco parecen más un bar o una guardería que un salón profesional: un lugar donde se charla, se cuentan novedades y se pasan horas, mientras las clientas soportan precios arbitrarios y atención al cliente inexistente.

Con este panorama, me di cuenta de algo muy importante: no tenía necesidad de pasar por ese trago. Llevar el pelo corto siempre ha sido lo que más feliz me hace. Puede que mi corte no sea tan icónico como el de Lupita Nyong’o, pero me permite ser fiel a mí misma, y eso no tiene precio.

Así que, antes de que decidas hacer un cambio en tu cabello, tu estilo de vestir, tu trabajo o incluso tu ciudad, pregúntate: ¿me hace feliz? ¿Estoy siendo fiel a mí misma? A menudo, los mensajes que recibimos sobre cómo debemos ser son tan sutiles que, cuando nos damos cuenta, ya hemos caído en la trampa de hacer algo que va en contra de nuestra esencia.

Sé siempre auténtica. Ser fiel a ti misma no solo te hará más feliz, sino que también te permitirá vivir en paz contigo y con tus decisiones.😊

En cuanto pueda subieré una foto de mi corte de pelo.

Un abrazo muy grande. Hasta el próximo post.

Deja un comentario

Tendencias