

Si llevas tiempo utilizando sérums con textura oleosa, habrás notado que algunos dejan una sensación grasa y tardan en ser absorbidos por la piel, mientras que otros son mucho más ligeros y se integran rápidamente. Seguramente te has preguntado cuál es la razón detrás de esta diferencia tan notable.
A continuación, te lo explicaré en detalle.
Aceites secos y aceites naturales: ¿Cuál es la diferencia?
En el mundo de la cosmética, los aceites han sido un recurso esencial durante siglos. Tradicionalmente, se utilizaban para hidratar el cuerpo, nutrir el cabello o como complemento en masajes. En muchos casos, estos aceites también se aplicaban como mascarillas faciales que debían retirarse después de un tiempo.
Hace no tanto tiempo, la idea de dejar un aceite en el rostro durante todo el día habría resultado impensable para la mayoría de las personas. Sin embargo, la llegada de los aceites secos marcó un antes y un después en la industria cosmética, transformando por completo la percepción que teníamos de los aceites como productos de belleza.
Ahora bien, ¿qué diferencia existe entre estos innovadores aceites secos y los aceites naturales más tradicionales, como los de coco, oliva, jojoba o aguacate? A continuación te damos la explicación que buscabas.
La diferencia entre un aceite seco y un aceite natural radica en su textura, propiedades y forma de aplicación:
Aceite seco:
- Composición: generalmente, es una mezcla de aceites vegetales ligeros combinados con siliconas u otros ingredientes que facilitan una rápida absorción.
- Textura: es ligero y no deja sensación grasosa en la piel.
- Absorción: se absorbe rápidamente, lo que lo hace ideal para quienes no quieren sentir una película oleosa.
- Uso: suele utilizarse como producto multifuncional, perfecto para hidratar la piel, el cabello e incluso como acabado en el maquillaje.
- Ejemplo: aceite seco de argán, aceites secos enriquecidos con vitamina E, C o fragancias.
Aceite natural:
- Composición: son aceites extraídos directamente de plantas, semillas o frutos, sin aditivos químicos ni procesamiento intensivo.
- Textura: varía según el aceite; algunos son más pesados (como el aceite de coco o el de ricino) y otros más ligeros (como el aceite de jojoba o el de almendra).
- Absorción: puede ser más lenta, dependiendo del tipo de aceite, dejando una sensación más grasosa.
- Uso: se utiliza comúnmente para tratamientos naturales, como hidratación profunda, masajes, aromaterapia y cuidados específicos de la piel o el cabello.
- Ejemplo: aceite de oliva, aceite de aguacate, aceite de rosa mosqueta.
Resumen:
- El aceite seco es más cosmético, ligero y versátil para el día a día, mientras que el aceite natural es más puro y tradicional, con propiedades específicas según el tipo. La elección depende de las necesidades y preferencias personales. Dicho esto, recuerda que siempre, debes elegir el aceite dependiendo de cuál ese tu tipo de piel. Al igual que harías con cualquier otro cosmético. Y no olvides hacerte la prueba del parche, tienes un post sobre este tema en este mismo blog. Solo haz clic en el enlace
Aquí te dejo algunos de los aceites más conocidos.
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Un saludo. Hasta el próximo post.











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