La Gratitud: una puerta para sanar el alma.

La importancia de saber ser agradecida

Gratitud, una palabra que a menudo olvidamos y que practicamos poco. Dice el refrán: «es de bien nacido ser agradecido» Si hiciéramos acaso a estas palabras seríamos felices, menos envidiosos y más humanos. A menudo nos olvidamos de las cosas buenas que hay en nuestra vida. Solo miramos aquello que no funciona, o no podemos hacer. Hoy os reto a dar gracias a todo aquello que os hace feliz, todo aquello que hay en vuestra vida que hace que esta merezca la pena. Quiero pediros que miréis a vuestro alrededor y hagáis una lista de cosas, personas que marcan la diferencia en vuestra rutina diría.

Dar gracias te convierte en una persona educada. Ser agradecida te convierte un ser humano con una inteligencia emocional alta. Una persona capaz de dar sin pedir nada a cambio. Un ser capaz de verlo positivo en medio de caos que le rodea. Recuerda dar las gracias por todo lo que tienes y todo lo que vendrá. Puedes hacerlo de muchas formas sin importar la religión que proceses o en lo que crees. Yo lo hago cuando medito, o en la noche, mientras escribo en mi cuaderno las reflexiones sobre el día y lo que quiero para la mañana siguiente. No importa como lo hagas sino, el hecho de hacerlo.

Un saludo, Curly. Espero que este ejercicio de agradecimiento te ayude a valorar todo lo que tienes a tu alrededor. A veces parece que no tenemos nada y, sin embargo, tenemos muchos si miramos un poco más allá de nuestra persona.